Una nueva semana comienza y nuevos proyectos se asoman a la distancia. Dios siempre tiene algo diferente y agradable para nosotros.
Hoy les cuento que me teñí el cabello después de casi 7 años de no hacerlo. En mis años de adolescente fui muy rubia pero había decidido mantener mi color natural pues los químicos son muy fuertes y dañinos, pero hice mi coloración porque traía en mente hace mucho, las mechas californianas. Lamentablemente no fue lo que esperaba porque mi cabello es muy abundante y no me alcanzo el producto y no tenía a nadie para que fuera por otro más.
Lo positivo de mi cambio es que me puedo ir aclarando las mechas poco a poco hasta alcanzar el color que quiero.
No quiero terminar éste post sin agradecerle a mi hermana mayor porque siempre está al pendiente de mi en todo sentido y momento. Siempre acierta en todo.
Gracias por pasar a leer la entrada de hoy. Los dejo con las fotitos. Muakkkkkkkkkkk
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